CLAFOUTIS DE ALBARICOQUE

Las primeras referencias de cultivo se recogen en China, concretamente en el año 3000 a.C. El poder imperialista de la cultura romana los introdujo en el continente europeo a través de la actual Armenia, de donde deriva su nombre: Prunus armeniaca.
Fruta de color anaranjado dulce y deliciosa, el albaricoque se deben consumir rápidamente porque una vez recogidos los albaricoques no maduran y se oxidan en contacto con el aire. Se deben elegir de un palido color naranja y sin matices verdes. La piel suave es un signo de madurez porque el albaricoque pierde su pelusilla cuando está maduro. Atención, dependiendo de la variedad algunos frutos tienen un color rojo antes de que maduren.

Posee 47 kcal x 100 g, con un promedio de 30 kcal por cada albaricoque
contiene beta caroteno, vitaminas A y C y potasio
Su temporada  ideal: junio-agosto


Los albaricoques congelan bien abiertos por la mitad, retirando el hueso y colocados en bandejas. Una vez congelados guardar en bolsas. Se utilizan en ensaladas, mermeladas, tartas, clafoutis y sorbetes de albaricoque; combina muy bien con almendra, vainilla, lavanda y violeta. Cuando se secan, pierden la vitamina C, pero contienen hierro y perfuman platos agridulces como los tagines y guisos, solo una advertencia: los albaricoques secos son a menudo tratados con sulfitos para mantener su color naranja. Las personas alérgicas deben mirar la etiqueta

 

Contienen gran cantidad de agua (85%) y mucha fibra. La pectina que contienen es ideal para favorecer el transito intestinal. Es la fruta que más caroteno contiene (con el melón y mango). Es muy rica en minerales como el potasio.
El albaricoque es también uno de los primeros frutos que se pueden utilizar para los bebés, cocido y triturado. Tiene un índice glucémico moderado de 57 (contra 81 para la patata o el arroz, el pan 100, 119 los cereales para el desayuno, o 126 para la miel). Por lo tanto, cumple con los deseos de los nutricionistas, pendientes de alimentos que eviten fuertes aumentos de azúcar en la sangre.


Ingredientes

600 gr. de albaricoques naturales

3 cucharadas de licor de melocotón

60 gr. de azúcar, 

500 ml. de leche

2 huevos

1 cucharadita de extracto de vainilla

5 cucharadas de azúcar glas

7 cucharadas de harina, 

una pizca de sal

Pre calentar el horno a 180º y embadurnar de mantequilla el molde

Lavar y deshuesar los albaricoques. En un bol poner el licor, los 60 gr. de azúcar  y las mitades de albaricoque, dejar reposar durante 30 minutos removiendo de vez en cuando.

Pasado este tiempo escurrir y colocar en el molde con el hueco del hueso hacia abajo.

Mezclar en un  recipiente grande las 5 cucharadas de azúcar glass, la sal  y las 7 de harina, hacer un volcán en el centro e incorporar los huevos uno a uno, la vainilla, la leche y si nos ha quedado añadiremos el resto del licor de macerar los albaricoques, batir.  Nos debe quedar una masa liquida y sin grumos. Meter en el horno durante 30/40 minutos, si se dora demasiado poner encima un papel de horno.